Otro engaño. Cuando te espere no viniste a verme, ahora que vienes no me esperes; que llego tarde. Es el otoño un árbol enraizado en este invierno, son tus besos una fábrica de nostalgias. El perdón es lo que queda cuando la memoria olvida el olvido y cuando mis labios dejan de buscar tu nombre en otras bocas. Ya mis zapatos están rotos y gastados; porque como dice el tango, se cuidan solo cuando se anda de rodillas. Y fue de pie que libre esta batalla. ¿Perdón? Aquí lo tienes; no viene está vez de simulacro, ni busca redemirte con poemas, ni busca, porque no encuentra, motivos para odiarte.
"Un espacio donde juegan los seres que no lastiman"